Esta iniciativa surgió ante los enormes volúmenes de agua que consume la producción textil y el resultado se materializó en una nueva fábrica de producción en Vietnam. La empresa conjunta CleanDye es nuestra primera inversión directa en nuestra cadena de suministro. En esta planta teñimos sin utilizar agua ni productos químicos de proceso desde 2019.
Es posible gracias a una innovadora tecnología de teñido que se utilizó por primera vez en el mundo en ella. En la fábrica CleanDye, el CO₂ se licua a alta presión y porta el tinte. Tras el teñido, el 95 % del CO₂ utilizado puede reutilizarse, con lo que permanece casi por completo en el ciclo. Este proceso ahorra energía y no libera sustancias tóxicas que tendrían que eliminarse como residuos o aguas residuales.
De esta forma, CleanDye es una alternativa sostenible para abordar algunos de los principales riesgos medioambientales y sociales de la producción textil. Si se manipulan, almacenan y eliminan de forma inadecuada, los productos químicos de proceso pueden poner en peligro la salud de los trabajadores y de las comunidades locales.
Por su parte, los productos químicos residuales requieren un tratamiento costoso o contaminan las aguas residuales. Este proceso de teñido también reduce el consumo de agua dulce: en los procesos de tintura convencionales se consumen hasta 25 litros por camiseta.
Actualmente, CleanDye no solo trabaja para nosotros. Otros proveedores de moda también recurren a esta solución sostenible para reducir el consumo de agua y productos químicos en sus prendas.